Una de las orquestas más antiguas de Rusia, la “State Academics Symphony Orchestra” se presentó este lunes 20 en el Centro de las Artes 660 de CorpArtes, en un concierto único con más de 80 músicos, obteniendo un gran éxito por el notable desempeño de sus integrantes y la excelente programación elegida, lo que le valió ser repetidamente aplaudida e incluso ovacionada por el público que repletó las instalaciones del teatro de Rosario Norte 660.
La agrupación europea llegó a Chile encabezada por el director noruego Terje Mikkelsen, quien condujo con mano maestra la presentación y regaló al público con dos “encores” al final del concierto (ambos con obras breves de Tchaikovsky). Ya con una larga trayectoria, Mikkelsen ha dirigido orquestas en Japón, China, Tailandia, Estonia, Lituania, Suecia, Noruega, Alemania y Países Bajos; y ha tenido importantes cargos, como Director Titular y Director Musical de la Ukrainian State Symphony Orchestra. Además ha sido Director Principal Invitado de la Lithuanian State Symphony Orchestra, y Director Musical y Director Titular de Latvian National Symphony Orchestra. Actualmente, dirige de manera regular a la St. Petersburg Philharmonic y la Tchaikovsky Symphony Orchestra of Moscow Radio, con quienes se presentó en el Rachmaninoff Piano Competition and Festival en Los Angeles (EE.UU.).
Gran figura del concierto fue el solista en cello Alexander Buzlov, uno de los intérpretes más destacados de la generación joven de músicos rusos, quien lució talento, inspiración y enorme técnica en la ejecución del Concierto para violoncello y orquesta en si menor, Op. 104 del checo Antonín Dvořák, sin duda la parte más brillante de la aplaudida función musical. Buzlov empezó a tocar el cello a los 6 años y ya ha participado en competencias tanto en Rusia como en el extranjero. Entre estas se cuentan la ARD en Munich y los de Pablo Casals y Tchaikowsky en 2007. Además fue seleccionado para el programa New Names y ganó una beca de la Fundación Mstislav Rostropovich. Se ha presentado con orquesta de gran nivel mundial con directores como Leonard Slatkin, Yakov Kreizberg, Valery Gerigiev y Alexander Vedernikov, entre otros.
La programación de este lunes comprendió un estelar trío de composiciones, partiendo por la Rapsodia Noruega N°1 en la mayor, de Johan Halvorsen, uno de lo músicos y compositores noruegos más famosos, junto al gran Edvard Grieg, ejemplo de músico relacionado con el movimiento nacionalista artístico de su patria, De hermosa melodía, la obra contó con una orquesta en pleno, de sobresaliente participación, especialmente cuerdas y vientos. La Rapsodia concluye con un final vertiginoso.
En el final del Concierto, con la Sinfonía N°4 en fa menor, Op. 36 del ruso Pyotr IlychTchaikovsky, esta obra mayor de la literatura musical mundial, fue conducida e interpretada con su brillo acostumbrado, con un primer movimiento de impresionante potencialidad, de lucida participación de bronces y percusión, siguiendo con maderas y cuerdas. Los solistas de violín, cello y flauta, especialmente, relucieron en toda la presentación, con segura y eficaz conducción desde el podio, a cargo del maestro Mikkelsen.
