Protuberancias y ronchas en la piel provocadas por sarna, dermatitis por falta de aseo personal y pediculosis son las afecciones que ya se están viendo, principalmente, en la región de Atacama, tras las inundaciones.

Son los primeros indicios de que las atenciones médicas darán un giro inexorable en los próximos días. De atenciones por heridas y contusiones, se espera que pacientes con enfermedades respiratorias y gastrointestinales repleten consultorios y hospitales.

Se trata de enfermedades que se están registrando principalmente en albergues, provocando llagas en piel de algunas personas, luego de que presentaran una constante picazón, particularme en los pies, tras estar en contacto con el barro.

Así lo explicó el subsecretario de Salud Pública, Jaime Burrows, quien descartó la hipótesis de que la picazón de la piel podría deberse a la contaminación con metales pesados y ácido sulfúrico, que -se cree- podrían haber adulterado el agua de la región.

Las plagas podrían ser las primeras señales de las enfermedades esperables tras una catástrofe de este tipo. Según Karla Zamarca, enfermera docente de la Universidad de Atacama, que ha trabajado como voluntaria desde que ocurrió la tragedia y que ha trabajado en albergues y en el hospital Regional de Copiapó, estas enfermedades se han visto en un 60% de la población que está en los albergues.

Para Izkia Siches, presidenta del regional Santiago del Colegio Médico, y que es parte del refuerzo de facultativos que llegó a la zona el sábado pasado, la preocupación de los epidemiólogos para los próximos días y que han hecho ver a la autoridad, está en la prevención urgente de enfermedades gastrointestinales y respiratorias.

Pérdida de vacunas

Para enfrentar esta situación, el Ministerio de Salud explicó que ya se han enviado 89 mil dosis de vacunas para la influenza, de las cuales 12.340 ya se han administrado. En tanto, han llegado 27 mil vacunas aintitetánicas, con 10 mil ya inoculadas, y para la hepatitis A se han enviado 7.600, y se han administrado 3.000.

Frente a la polémica generada por la pérdida de vacunas contra la influenza, el Ministerio de Salud explicó que se perdieron más de 10 mil vacunas contra la influenza y 5 mil pertenecientes al programa nacional de vacunas. Pero todas perdieron la cadena de frío cuando se inundó el hospital de Copiapó y no durante el traslado desde Santiago.

Así lo explicó a Radio Bío Bío, desde Copiapó, el jefe de la División de Planificación Sanitaria del Minsal, Bernardo Martorell:

Con respecto al funcionamiento de la red de salud, desde el Ministerio explicaron que el Hospital Regional de Copiapó, que sufrió severas inundaciones, ya se encuentra operativo, no en su totalidad, pero tiene 200 camas habilitadas.

El Hospital de Diego de Almagro recibe 150 atenciones diarias. En la región de Atacama, 112 pacientes recibieron su diálisis, mientras que un total de nueve pacientes han sido trasladados a Santiago, incluso uno de ellos, era una mujer embarazada que dio a luz en la capital.