El balance del doble atentado contra una fiesta kurda el viernes en la localidad de Hasaka, en el noreste de Siria, se eleva a 45 muertos, informó el sábado una ONG siria, que acusa al grupo Estado Islámico (EI).

“Se contabilizan ahora 45 muertos, entre ellos cinco niños, tras los ataques de la pasada noche”, afirmó a la AFP Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Gran Bretaña.

“Murieron varias personas que habían sido heridas y se hallaban en estado crítico”, explicó. El balance anterior era de 33 muertos.

Los ataques, cometidos en la víspera del Noruz, Año Nuevo en kurdo, en Hasaka, no fueron reivindicados pero según Abdel Rahman, “el EI está detrás de este doble atentado”.

La provincia de Hasaka es estratégica por su cercanía con Turquía, pero también con Irak. En la ciudad operan las fuerzas del régimen y los combatientes kurdos de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG), mientras que los yihadistas del EI controlan varios sectores de esta provincia siria.

Las YPG se enfrentan encarnizadamente al grupo EI en varias zonas, y en enero lograron expulsar a los yihadistas de Kobane, tras meses de duros combates.