Finalmente, el nuevo obispo de Osorno, Juan Barros Madrid, llegó a Osorno en una hermética visita, la cual si bien pretendió pasar desapercibida, fue conocida por un grupo de feligreses que protestaron en la vivienda que será su futura morada, ubicada en calle Hermanos Filippi.

Pasado el mediodía se conoció que la pronta primera autoridad de la Iglesia Católica en Osorno había llegado a la ciudad, trascendiendo que se reunió en forma privada con sacerdotes de la diócesis local en el denominado Barrio Universitario, ubicado en la Población Kolbe, incluido el padre Peter Kliegger, uno de los principales cuestionadores a su nominación como obispo local.

Sin embargo, no llegó hasta la casa de calle Hermanos Filippi, donde integrantes del movimiento OLA lo espera, con tal de exigir una explicación de su parte respecto a su nominación, sobre su vinculación a Fernando Karadima y sobre lo secreto de su visita a Osorno.

El hecho de que no haya llegado hasta la casa de Hermanos Fillipi no fue bien visto por los manifestantes, pues demostraría que no quiere hablar con la comunidad, calificando a Claret como a una avestruz.

Según ha trascendido, el día de hoy el nuevo obispo de Osorno se reunirá con representantes de la iglesia durante la mañana, tiempo en el que los opositores a su nombramiento realizarán una velatón a eso de las 11 horas.