Varios cibernautas consideran que el piscinazo de Jhendelyn Núñez fue uno de los mejores de la historia del Festival de Viña. La modelo no sólo se lució con un atrevido atuendo, sino que además realizó un muy buen salto.
Sin embargo, para poder llegar a ese resultado, la reina del Festival tuvo que pasar por varias horas de preparación. Y es que poner los pequeños cristales que cubrieron el 30% de su cuerpo, requirió que la notera estuviera despierta desde las 4 de la madrugada.
Desde esa hora, el equipo del artista Marlon Parra comenzó a trabajar en la piel de Nuñez, quien tuvo que permanecer de pie por varias horas más luego que se finalizará la aplicación, ya que si se sentaba los cristales podían comenzar a despegarse, señaló el portal de noticias, Página 7.
La fijación del material debía ser tan perfecta, que incluso algunas de estas piedras debieron ser adheridas con el pegamiento conocido como “la gotita”, lo que le causó un poco de dolor ya que sentía como si se “quemara” con el producto.
A esto se sumó el cansancio acumulado por las actividades de campaña y su visita a la penúltima jornada del festival, donde no paró de bailar y cantar con Romeo Santos.
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Tras el esperado piscinazo, donde la modelo sólo pudo estar 5 minutos en el agua para evitar que las aplicaciones se despegaran, Nuñez partió a descansar ya que tenía un fuerte dolor de espalda que no la dejaba en paz.
Pero a pesar de todos los malos ratos, la joven logró su objetivo y se robó todas las miradas de la 56º versión del Festival de Viña.
Agencia UNO
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