El presidente estadounidense, Barack Obama, expresó su solidaridad con Dinamarca este lunes después de los ataques que conmocionaron a la nación nórdica, y se comprometió a enfrentar el antisemitismo y los ataques a la libertad de expresión junto con Copenhague.

En una conversación telefónica, Obama y la primera ministra de Dinamarca, Helle Thorning-Schmidt, “coincidieron en la necesidad de trabajar juntos para hacer frente a los ataques contra la libertad de expresión, así como contra la violencia antisemita”, dijo la Casa Blanca en un comunicado.

Según la nota, Obama ofreció a Thorning-Schmidt sus condolencias por las víctimas y expresó la “solidaridad estadounidense” con sus “aliados daneses.”

Obama también dio la bienvenida a la participación de Dinamarca en una cumbre de alto nivel de tres días que tendrá lugar esta semana en Washington para compartir las mejores prácticas y acordar un plan de acción para luchar contra la actividad de grupos como el islamista Estado Islámico (EI) y el reclutamiento y la incitación a la violencia, dijo la Casa Blanca.

Los gobiernos europeos se esfuerzan por tranquilizar a sus comunidades judías luego de recientes ataques extremistas con tono antisemita y poco más de un mes después de los ataques al semanario satírico francés Charlie Hebdo, que publicó varias caricaturas controvertidas del profeta Mahoma, y a un mercado kosher en París.

En Dinmarca, la primera víctima fue el cineasta finlandés Norgaard (55), que murió cuando un hombre armado abrió fuego durante un debate sobre la libertad de expresión el sábado último. El mismo atacante luego disparó contra la sinagoga central de Copenhague, matando a un hombre.