Organizaciones pro animales recibieron de buena forma, aunque con cautela, el anuncio del Gobierno que suspende el decreto de ley que permitía la caza de perros asilvestrados, argumentando que esto ya se había hecho en el pasado y que lo que buscan finalmente es la derogación de la norma.
La ley, que entró en vigencia el 31 de enero de este año, fue ingresada el 2013 bajo el mandato de Sebastián Piñera, el cual considera a los perros asilvestrado o en bravío como dañinos, permitiendo la matanza libre de estos.
Ante este escenario, Pamela Alfaro, directora ejecutiva de la Fundación RIMA manifestó que esta suspensión es un avance, pero que finalmente no es lo que ellos como organización están buscando, ya que, a pesar de la suspensión del decreto aún se puede cazar, mientras que lo que se pretende, es la derogación de la ley.
A pesar de no conseguir en primera instancia sus objetivos, Alfaro valoró la intención del ejecutivo para avanzar en este tema, ya que, a su parecer, la promulgación de la ley era una contradicción a la campaña de esterilización masiva impulsada por la Presidenta.
Respecto al rechazo que mostraron los agricultores del sur del país que reaccionaron molestos por la suspensión de la ley, Maria Teresa Pinochet, encargada de la décima región de la Fundación CEFU, indicó que entendían la posición de los agricultores, y que la solución pasaba por la esterilización de los animales y la asignación de recurso para resolver el problema, y no la matanza masiva de perros.
Por otra parte, la diputada, Karla Rubilar de Amplitud, mostró su satisfacción por la suspensión de la norma que permitía la casa de perros asilvestrados , ya que este decreto iba en contra del proyecto que se tramita hace años en el Congreso que regula la tenencia responsable de animales por parte de la comunidad.