El pasado lunes 9 con la llegada a Punta Arenas del Transporte AP-41 “Aquiles”, finalizó la etapa marítima de la 51ª Expedición Científica Antártica (ECA) del Instituto Antártico Chileno, Inach.
Este año la actividad incluyó la reapertura de la base Yelcho en la Isla Doumer, y la utilización de una segunda unidad de la Armada de Chile, el Rompehielos AP-46 ‘Almirante Óscar Viel’.
318 investigadores asociados al Inach, de los cuales 171 fueron chilenos y los restantes de otros países visitaron el continente blanco.
El director nacional del Inach, Dr. José Retamales señaló que la expedición es la campaña más grande debido a los más de cien proyectos que se ejecutaron o que continúan en desarrollo, y que pueden llevarse a cabo gracias a los buques de la Armada.
Además “Aquiles” llevó a bordo dos helicópteros destinados al transporte de los investigadores y sus equipos, los que contribuyeron a movilizar a 166 científicos de 21 nacionalidades.
En las 2.613 millas náuticas recorridas, el buque antártico brindó el apoyo logístico a nueve bases extranjeras y diez chilenas, a través de la entrega de 856 metros cúbicos de carga, que incluyeron víveres, equipos científicos y materiales de construcción para la restauración de las bases.
Además en el marco de esta actividad, se llevaron hasta Punta Arenas 128 metros cúbicos de desechos para dar cumplimiento al Protocolo de Madrid, aprobado el año 1991 por el Tratado Antártico y entrando en vigencia en 1998, con el objeto de combatir cualquier tipo de contaminación en el Continente Austral.
Asimismo se controló el estado de tres balizas ubicadas en los sectores de las Isla Decepción y Robert. Actualmente, la Armada mantiene 67 señales marítimas con el propósito de otorgar seguridad a la navegación en la Antártica.