El entrenador de Universidad Católica, Mario Salas, aseguró que él no es el responsable del notorio cambio que han tenido sus dirigidos en comparación con el campeonato pasado. Además, se desmarcó de cualquier análisis en torno a la eliminación de la selección chilena Sub20.

Diametralmente opuesto es el rendimiento que exhiben los jugadores cruzados de la mano de Salas, en comparación al paupérrimo papel con Falcioni, sin embargo, para el ‘revolucionario’ entrenador el mérito es de exclusividad de los jugadores.

“Creo que se debe más que a mérito mío al interés y capacidad de los jugadores de sobreponerse a temas puntuales y que han visto en nuestra metodología e idea una posibilidad de poder desarrollarse y dejar atrás el pasado. El gran mérito no es mío, sino de los jugadores que tienen la capacidad, voluntad e inteligencia para hacer un cambio tan rápido”, aseguró Mario Salas en conferencia de prensa.

Al ser consultado por la nominación de Erick Pulgar, Roberto Gutiérrez y Mark González a la selección, quienes serán sometidos a la intensidad de los entrenamientos de Jorge Sampaoli, Salas no mostró preocupación, ya que aseguró que ellos lo hacen a niveles similares de intensidad y exigencia.

“Tendría que ser algo conocido (para los jugadores), no nos preocupa nada. Nos encanta que nuestros jugadores entrenen al máximo”, sentenció.

En cuanto a los refuerzos de Universidad Católica, el propio Gutiérrez, Walter Ibáñez y Pablo Álvarez, el estratega cruzado aseguró que han ido de menos a más.

“Han ido de menos a más. Ya están en mejores condiciones. No solo hay una mejora física, sino también táctica, psicológica, emocional, física y técnica”, comentó.

Finalmente y como era de esperarse, Mario Salas fue consultado por la humillante eliminación de la selección chilena Sub20 del Sudamericano de la categoría en Uruguay, el exseleccionador nacional de dicha escuadra en 2013, no quiso realizar análisis alguno de la escuadra de Hugo Tocalli.

“Pena por la eliminación temprana, pero la veo como hincha. No estoy capacitado para emitir una reflexión o análisis de algo que no soy partícipe. Pena por no clasificar, pero nada más que eso”, cerró Salas.