Por los delitos de contrabando, infracción a la Ley de Propiedad Intelectual y evasión fiscal fue procesado Javier Silva Barrientos, detenido mientras ingresaba a territorio chileno por el paso fronterizo Cardenal Antonio Samoré de Puyehue y quien era investigado por el millonario contrabando de cigarrillos detectado a principios de noviembre.
En la oportunidad el cargamento era transportado por el padre de Silva Barrientos, el que fue capturado cuando pretendía internar 38.450 cartones de cigarros. Tanto la carga como la devaluación fiscal fueron estimadas en cerca de 4 millones de dólares.
El fiscal Matías Montero señaló que el rastreo de Javier Silva se inició luego que su padre reconociera que la máquina de carga era de propiedad de su hijo, siendo este quien coordinaba la carga en la provincia de Chubut, Argentina, y el que finalmente lo enviaba para hacer entrega del contrabando.
A partir de ahí, añadió Montero, se le seguía la pista, prohibiendo al padre tomar contacto con él o entregar mayores detalles de la investigación que había ordenado el Ministerio Público en Osorno.
En la audiencia de control de la detención y formalización de cargos, añadió el persecutor, el juez de Garantía accedió a la petición del abogado defensor que rebatió la solicitud de prisión preventiva.
Sobre los cargos imputados, el fiscal añadió que son los mismos que pesan contra su progenitor..
A pesar de que el imputado fue dejado en libertad y con medidas cautelares alternativas, el persecutor dijo que se apelaría ante el Tribunal de Alzada ya que, a su juicio, los delitos y la magnitud de los mismos son prueba suficiente para que este permanezca en prisión preventiva por el lapso que dure la investigación, resolución que debiera dictarse dentro de las próximas semanas.