Una persona murió el sábado en el centro de El Cairo en enfrentamientos entre la policía egipcia y manifestantes, los que protestaban contra el abandono por un tribunal de las acusaciones por asesinato contra el ex-presidente Hosni Mubarak, indicó un responsable de la seguridad.

Más de mil manifestantes se dirigieron el sábado por la noche hacia la Plaza Tahrir luego del anuncio del veredicto pronunciado un poco antes. La policía usó granadas lacrimógenas y cañones de agua para dispersar a los manifestantes.

El expresidente Mubarak quedó libre el sábado del cargo de complicidad en la muerte de cientos de manifestantes durante la revolución de 2011 y de varios cargos de corrupción, pero seguirá en prisión cumpliendo otra condena.

Un tribunal de El Cairo desestimó la acusación sobre su responsabilidad en la sangrienta represión de las protestas de 2011, y lo absolvió de las acusaciones de corrupción que pesaban en su contra.

Pese a ello, Mubarak, que dirigió el país con mano de hierro durante 30 años, continuará detenido en un hospital militar cumpliendo una pena de tres años por otro caso de corrupción.

Sus dos hijos, Alaa y Gamal, igualmente juzgados junto a su padre, quedaron absueltos por la prescripción de los delitos de los que se les acusaba.

Mubarak, de 86 años, había sido condenado en junio de 2012 a cadena perpetua, pero la sentencia fue anulada por razones técnicas, lo que llevó a la celebración de otro juicio, que comenzó en mayo de 2013.

Más de 840 personas murieron en los 18 días que duró la revuelta popular de 2011 contra el régimen de Mubarak, en la que los manifestantes le exigían que abandonara el poder.