Tras la firma del protocolo de acuerdo para la recuperación y el uso sustentable del lago Laja, los canalistas advirtieron que la estrategia no garantiza una solución definitiva al problema. Mientras, Endesa mantiene a firme que el río y el cuerpo lacustre son corrientes distintas, lo que impediría la creación de una junta de vigilancia para el sistema.

El protocolo de acuerdo apunta al uso del agua realmente disponible en el sistema Laja, más allá de los derechos con que cuentan las partes interesadas. Es decir, se extraerán sólo 900 millones de metros cúbicos desde la cuenca, de los cuales un tercio será destinado a riego y los otros dos restantes para la producción de energía.

Al respecto, la subsecretaria de Energía, Ximena Jara, recordó que este convenio es fruto del trabajo sostenido de la mesa del agua que se constituyó en mayo, a petición de los usuarios del lago Laja.

Asimismo, agregó que pese al intenso debate que se registró durante estos meses, se concretó la firma de un documento que busca la explotación armónica del cuerpo lacustre.

En esa línea, el ministro de Agricultura, Carlos Furche, destacó la riqueza hídrica de la región del Bío Bío, recurso que debe administrarse con justicia para potenciar la vocación agrícola de la zona.

En tanto, Héctor Sanhueza, gerente de la Asociación de Canalistas del Laja, sostuvo que no se puede pensar que con éste esquema está todo solucionado.

Por ello, buscan el compromiso de Endesa y las autoridades para avanzar en la concreción de un bien mayor, que es la modificación definitiva el convenio de 1958.

Por su parte, Ramiro Alfonsin, subgerente general de Endesa Chile, detalló que los últimos cuatro años de sequía han ocasionado un panorama complejo para la agricultura y la industria generadora, por lo que con el fin de avanzar en un consenso, la empresa decidió renunciar a algunos de sus derechos de agua.

Al ser consultado sobre la voluntad de la compañía de acceder a la modificación del convenio de 1958 y a la creación de una junta de vigilancia sobre el sistema Laja, el directivo insistió en que el lago y el río son corrientes distintas, por lo que anunció mantendrán sus alegatos judiciales para demostrarlo.

Cabe mencionar que el protocolo de acuerdo, suscrito entre los regantes, empresarios turísticos, Endesa y los ministerios de obras públicas, energía y agricultura, tendrá una vigencia de dos años prorrogables.