Rusia anunció que no participará en la cumbre sobre seguridad nuclear prevista en 2016 en Estados Unidos, criticando su utilidad y el papel preponderante que según dice desempeña Washington.

“No nos parece posible participar en los preparativos de la cuarta cumbre sobre seguridad nuclear”, anunció el miércoles por la noche el ministerio ruso de Relaciones Exteriores en un comunicado.

Moscú explica que las tres cumbres anteriores, celebradas en Washington (2010), Seúl (2012) y La Haya (2014), propiciaron “avances significativos” en materia de seguridad nuclear, si bien “la participación política (en la cumbre) ya no es oportuna”.

Moscú dice que Estados Unidos, Corea del Sur y Holanda gozan de un papel predominante en la preparación de los documentos oficiales, lo que considera como “una discriminación flagrante con respecto a los demás países”.

Además, critica que los documentos finales de 2016 vayan a servir de base para los trabajos de Naciones Unidas, la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) o Interpol, viendo en ello un sesgo perjudicial.

El ministerio anunció también que a partir de ahora Rusia extenderá su cooperación con la AIEA, la agencia nuclear de la ONU con sede en Viena.

La cumbre de 2016 sobre seguridad nuclear se celebrará en Chicago.