Fue un tema que generó discusión y alarma en La Serena la semana pasada. Y es que la aparatosa caída de un árbol que se encontraba emplazado al interior de un establecimiento educacional hasta la zona de estacionamientos del recinto abrió el debate sobre el estado en que se encuentran las especies arbóreas en los diferentes sectores de la comuna.

Aquello, sobre todo luego de que tres días más tarde, a través de la sección Reportero Ciudadano de Diario El Día un lector denunciara la presencia de otro ejemplar situado en Almirante Allard casi al llegar a Balmaceda, también en deplorables condiciones y casi a punto de caer. “Está inclinado y con sus raíces fuera de la tierra. Está a punto de caer hacia la calle”, precisaba un preocupado Juan Seguel, a través de nuestro sitio web.

Y es que el cibernauta sostenía que en cualquier momento podía producirse un accidente dada la gravedad de la situación. “Si el árbol continúa ahí, representa un peligro tanto para los transeúntes como para los automovilistas”, agregaba, haciendo el llamado a las autoridades comunales para que se hicieran cargo del problema.

Nada nuevo

El problema no es nuevo. Resulta que cada cierto tiempo, suelen ocurrir situaciones similares y buena parte de ellas en sectores céntricos de la comuna.

Tal fue el caso ocurrido en octubre del 2013 cuando en la Avenida de Aguirre yendo hacia el sector del Faro Monumental, un enorme arbusto cayó espectacularmente sobre la vía generando el impacto de la comunidad tanto en las redes sociales como en quienes presenciaron el hecho in situ, que en todo caso, indicaron que finalmente no pasó a mayores.

En el municipio de La Serena reconocen el problema. Aseguran que han visto con preocupación los hechos ocurridos, sobre todo en las últimas semanas ya que, según afirman, serían muy difíciles de prever. Así lo afirma el encargado del Departamento de Servicio a la Comunidad Juan Alfaro, quien comenta que incluso se han conocido más casos. “Además de lo que pasó en Las Compañías en el estacionamiento, también hace pocos días en la Avenida De Aguirre se nos cayeron una ramas considerables que aplastaron un vehículo”, dice el funcionario.

Alfaro enfatiza que están haciendo lo posible por evitar algún tipo de accidente y han efectuado un especial trabajo precisamente en la Avenida de las Estatuas, donde las grandes y antiguas especies arbóreas, eventualmente, podrían provocar un problema. “Estamos siendo lo más precavidos posibles con este tema, tratando de anticiparnos a las eventuales caídas (…) En la Avenida, como los árboles son antiguos estamos haciendo seguimientos constantes y tratando de podar lo más posible”, agrega.

¿La sequía?

Una de las teorías que se han barajado es que la sequía que hace prácticamente una década afecta a la Región de Coquimbo esté causando la caída de los árboles. Sin embargo, aquello es descartado por el departamento de Servicio a la Comunidad, donde aseguran haber hecho los estudios con profesionales y que en la mayoría de los casos se trataría de especies que están podridas, o sucumben dada su antigüedad.

“Los árboles nunca se han dejado de regar, por lo tanto esto no es causa de la sequía. Hay otras causales como las que te mencionaba o el mismo viento que a veces se torna muy fuerte e impredecible”, asegura Alfaro.

Desde el municipio de La Serena señalaron que están tomando las medidas para prevenir accidentes, pero que muchas veces es la misma gente la que les impide podar los árboles que podrían implicar un riesgo.

No siempre se puede actuar

El acalde de La Serena, Roberto Jacob, también manifestó su preocupación y aseguró que se está tomando las medidas para mitigar un problema que se podría presentar en cualquier momento. “Nosotros vamos monitoreando los árboles, y los vamos podando sobre todo los que representan peligros en grandes paseos peatonales, como en la Avenida de Aguirre”, indicó Jacob.

Sin embargo, el edil expresó que a veces no se puede hacer demasiado debido a que es la misma gente la que se opone a que se efectúen las podas. “Ya ha pasado en otras oportunidades en que nosotros hemos ido a podar y a sacar las ramas secas que se puedan caer como ha pasado otras veces, pero la gente se opone porque cree que estamos haciéndole un daño a las especies y lo que estamos haciendo es protegiéndolos a ellos mismos, porque no queremos que cuando se caiga uno alguien resulte herido”, insistió el edil.

Derecho ciudadano

El llamado a “hacer algo” para que estas caídas inesperadas de árboles no continúen produciéndose ya lo había hecho el vecino Juan Seguel, quien advirtió sobre el peligro que estaba generando una especie en el sector de Almirante Allard. Y claro, en el municipio toman la sugerencia ya que saben que ellos son los responsables de tenerlos en buenas condiciones, y, de suceder un incidente mayor, se arriesgan a pagar indemnizaciones dependiendo de la gravedad del daño causado.

Así lo afirma el abogado Carlos Esperguen, quien explica que esta obligación está explicitada en la propia Ley Orgánica de municipios que estipula que la casa edilicia debe cumplir con cierto tipo de servicios. “Esta normativa le asigna a los municipios la responsabilidad en los daños que causen y proceden principalmente de cuando se produzca una falta de servicios, lo que puede ser una rotura de un pavimento, un hoyo en una calzada, o también la caída de un árbol. Éstas se consideran faltas de servicio porque el municipio no habría realizado su labor de vigilancia para evitar un daño a terceros, por lo tanto es probable que en el orden civil se pueda responsabilizar a las municipalidades condenándolas al pago de los daños que se pueden sufrir, daños físicos y morales”, concluye el experto.