Con resignación asumen en algunos locales nocturnos la puesta en marcha del incremento al impuesto en los licores, aunque advirtieron que hay sectores que se han encargado de generar una campaña del terror en torno a una materia que no resiente de manera tan brusca el tema de los precios.

Robinson Castillo, locatario del denominado Barrio Bohemio de Osorno, señaló que efectivamente hay modificaciones que se deben asumir a la hora de atender a publico en éste tipo de establecimientos, pero que tampoco se traduce en alzas abismantes.

De igual modo apuntó a la información de la ciudadanía, especialmente en entender los costos adicionales que trae consigo el reajuste en el precio del licor, ya que hay algunos sectores, especialmente insertos en la cadena de distribución, que aprovechan el efecto mediático para sobre reajustar sus valores.

Recordemos que la recarga impositiva que trae la Reforma Tributaria identifica a vinos y cervezas con un aumento de su porcentaje de impuestos desde 15 a un 20,5%; sin embargo, el mayor incremento se producirá en los destilados como el pisco, el ron y el whisky, que pasarán del 27% actual a un 31,5%.

Con estas proyecciones, se preveía que una botella de pisco de un litro que hoy en promedio cuesta 4.800 pesos, podría alcanzar los 5.400 pesos; mientras que una botella de ron de en promedio 6.800 pesos puede llegar a los 7.800 pesos.