El ejército iraquí y las milicias chiitas lanzaron el sábado una importante ofensiva para romper el cerco impuesto desde hace más de dos meses por los yihadistas del Estado Islámico (EI) a una ciudad turcomana chiita al norte de Bagdad, según responsables.
Miles de milicianos lanzaron el asalto por el norte mientras que las fuerzas regulares avanzaban desde el sur en dirección de Amerli, situada a 160 km al norte de Bagdad y totalmente rodeada por los yihadistas desde el 18 de junio, precisaron un oficial y un comandante de las milicias.
Los residentes de Amerli sufren escasez de agua, de alimentos, y su fe chiita es considerada una herejía por los sunitas del EU, que han actuado con crueldad contra miembros de esa comunidad y contra otros en el país.
El teniente general Abdulamir al Zaidi informó que la operación fue lanzada con el apoyo de la aviación iraquí.
Karim al Nuri, portavoz de una milicia conocida como Badr, informó por su parte que miles de sus combatientes están tomando parte en los combates junto a voluntarios civiles y miembros de las fuerzas de seguridad.