Durante 40 años, la fotógrafa de San Francisco en Estados Unidos, Lucy Hilmer, se tomó una serie de imágenes en topless y con diferentes poses.

Desde 1974 no utilizó nada más que zapatos, calcetines y ropa interior de color blanco para fotografiarse y denominar su trabajo como birthday suit, o “como Dios le trajo al mundo”.

Las fotos fueron tomadas en la playa, el campo, la carretera, incluso en su hogar dando pecho a su pequeño hijo, con la finalidad de crear una historia visual de su vida en la que se demuestra distintos estados psicológicos y etapas de un ser humano, según Huffington Post estadounidense.

“Acababa de empezar mis estudios en fotografía en San Francisco y me fui a Zabriskie Point, en el Valle de la Muerte, en California. Por intentarlo y como homenaje a (Miguel Ángel) Antonioni y su película homónima contra la contracultura me propuse tomar una imagen de mí misma así, porque en esos días él había dicho que no podía confiar en nadie mayor de 30 años. En 1974, cuando cumplí 29 años, pensé que tenía que inmortalizarme a mí misma en el último buen año que me quedaba, aseguró la mujer.

22 de abril de 1981: A los 36 años

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