El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió el viernes a Hamas que pagará “un alto precio” por la muerte de un niño de 4 años por un obús de mortero lanzado desde Gaza.

“Hamas pagará un alto precio por este ataque. (El ejército y los servicios de inteligencia) intensificarán sus operaciones hasta que se haya alcanzado el objetivo” de la operación militar lanzada el 8 de julio, dijo el jefe de gobierno, citado por uno de sus portavoces, Ofir Gendelman.

Es el primer niño que fallece en el lado israelí desde que se inició la ofensiva, que Tel Aviv emprendió para anular la capacidad de Hamas de disparar cohetes contra su territorio.

Otros tres civiles, uno de ellos un trabajador tailandés, han muerto en Israel durante el conflicto, así como 64 soldados dentro y en los alrededores de la Franja.