Una aparente desaceleración del calentamiento de la superficie terrestre en los últimos 15 años podría deberse a que el calor está atrapado en las profundidades del océano Atlántico y de los mares del sur, dijeron el jueves investigadores.
El estudio, publicado en la revista Science, sugiere que tales ciclos han tendido a ocurrir en los últimos 20 a 35 años, y que el calentamiento global se agudizará nuevamente una vez que el calor ascienda a la superficie del agua.
“Cada semana hay una nueva explicación de estas interrupciones”, dijo el coautor de la investigación Ka-Kit Tung, profesor de matemáticas aplicadas y miembro adjunto de la facultad de ciencias atmosféricas de la universidad de Washington.
“Miramos las observaciones en el océano para tratar de encontrar la causa subyacente“, explicó.
Tung y Xianyao Chen, de la Ocean University de China, estudiaron las temperaturas de las profundidades a partir de muestras de agua de hasta 2.000 metros de profundidad.
Descubrieron que en 1999 comenzó a calentarse más el agua, justo cuando el rápido calentamiento del siglo XX empezó a declinar.
El hecho de que el calor se desplace hacia lo profundo de las aguas explica que la superficie continúe con temperaturas estables, de la misma forma en que los gases de efecto invernadero atrapan más el calor del Sol en la superficie de la Tierra, explicaron los expertos.
Además hallaron que, a diferencia de estudios previos, no era en el océano Pacífico donde quedaba atrapado el calor.
“Este descubrimiento es una sorpresa”, dijo Tung. “Pero los datos son bastante convincentes y muestran otra cosa”.
El cambio coincidió además con un incremento de la salinidad y densidad del agua en la superficie del norte del Atlántico, cerca de Islandia.
Esta dinámica genera cambios en la velocidad de las enormes corrientes en el Atlántico que circulan calientes a través del planeta, explicó el estudio.
“Cuando el agua más densa está por encima de la más ligera, cae muy rápido y su temperatura aumenta por eso”, dijo Tung.
“Hay ciclos recurrentes impulsados por la salinidad que pueden almacenar el calor en las profundidades del océanos Atlántico y los mares del sur”, añadió Tung.
“Después de 30 años de calentamiento acelerado en la fase caliente, ahora es momento de la fase fría“, concluyen.