El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, expresó su profundo pesar por el fallecimiento del general Ricardo Izurieta Caffarena, “primer comandante en jefe del Ejército chileno designado por un gobierno democrático, con quien me correspondió actuar en tiempos difíciles”, indicó.
El general Ricardo Izurieta Caffarena, fallecido este domingo a la edad de 71 años, sucedió como comandante en jefe del Ejército a Augusto Pinochet en 1998, bajo el gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle. En esa época el actual secretario general de la OEA se desempeñaba como ministro de Relaciones Exteriores, cargo en el que debió enfrentar la detención de Pinochet en Londres.
Insulza recordó que “frente a una situación inesperada, que ponía en riesgo el desarrollo normal de la transición democrática, el general Izurieta actuó en favor de la institucionalidad y conforme a las políticas fijadas por el gobierno del presidente Eduardo Frei”.
Con su actitud, afirmó el máximo representante de la OEA, el ex comandante en jefe “contribuyó de manera importante a la solución de la crisis planteada”.
Por su parte el senador de la Unión Demócrata Independiente (UDI) por Los Lagos, Iván Moreira, destacó la figura del desaparecido militar como un protagonista de la “transición hacia la civilidad”. El legislador sostuvo que Izurieta “generó las bases para modernización del Ejército. Su desafío fue encontrar los equilibrios luego de general Pinochet e Izurieta a pesar de las presiones fue el comandante en jefe que trató con mayor dignidad y solidaridad al general Pinochet”.