Las empresas informáticas Samsung y Apple decidieron abandonar sus pleitos recíprocos en materia de patentes, salvo en Estados Unidos, anunció este miércoles el gigante surcoreano de la electrónica.

“Samsung y Apple acordaron renunciar a cualquier contencioso entre ambas empresas fuera de Estados Unidos”, donde están en juego cientos de millones de dólares, indicó Samsung en un comunicado.

“Este acuerdo no contempla ninguna autorización referente a las licencias” que permita a uno utilizar patentes del otro y “las empresas mantienen los procesos en curso ante los tribunales estadounidenses”, añadió.

Los dos grandes grupos tecnológicos han multiplicado estos últimos años las querellas recíprocas por violación de patentes.

Juntos se atribuyen más del 40% del mercado mundial pero su dominación en el segmento más puntero les permite acumular casi todos los beneficios del sector.

Apple interpuso una primera querella contra su competidora en 2011 por violación de patentes del iPhone. Samsung replicó acudiendo a la justicia en ocho países -Francia, Corea del Sur, Alemania, Japón, Italia, Holanda, Gran Bretaña y Australia- y Apple lanzó contraofensivas judiciales en cinco de esos países.

En Estados Unidos, Apple ha obtenido varias veces la prohibición de antiguos modelos de teléfonos inteligentes de Samsung por la USITC, la comisión estadounidense de comercio internacional.

En mayo pasado, un tribunal californiano condenó a Samsung al pago de 120 millones de dólares a Apple en uno de los casos juzgados, una mera fracción de los 2.000 millones de dólares reclamados por Apple.

Denuncia de Microsoft

Samsung fue declarada culpable inicialmente de violaciones de una serie de patentes de Apple el 24 de agosto de 2012 por un jurado que estimó los perjuicios en 1.050 millones de dólares. La multa fue reducida luego pero los procesos se suceden y la factura provisional asciende a más de 900 millones de dólares. Los veredictos siguen supeditados a posibles recursos que Samsung ha dicho que presentará.

“Los contenciosos estadounidenses son los más importantes para ambos grupos”, señala Michael Carrier, un experto en patentes de la Rutgers University.

“Están en juego sumas colosales y sobre Apple duda en renunciar. Pero creo que el grupo estadounidense acabará por ver que no gana nada emperrándose”, añade el jurista, citado por la agencia Dow Jones.

Claire Kim, de Daishin Securities, tiene un análisis similar: “no ganarán nada prolongando los procedimientos judiciales porque el mercado ha cambiado, la estrategia que consistente en ganar cuotas de mercado atacando a los competidores se ha quedado antigua”, explicó a la AFP.

La semana pasada, Apple renunció a recurrir un veredicto desfavorable que desestimó una demanda de prohibición permanente de una decena de productos Samsung.

Apple, por su parte, llegó a un acuerdo con Google para solventar su litigio relacionado con Motorola, comprado a Google por el chino Lenovo pero del que el gigante estadounidense de internet conservó la cartera de patentes.

En Estados Unidos, Samsung debe pelear ahora en varios frentes con la presentación la semana pasada de una denuncia de Microsoft por ruptura de contrato.

Samsung y Microsoft suscribieron un acuerdo cruzado sobre el uso de sus patentes respectivas en 2011. El grupo surcoreano aceptó entonces pagar cánones por el sistema de explotación Android.

Microsoft acusa al grupo surcoreano de no haber efectuado a su debido tiempo un pago previsto el pasado otoño, después del anuncio de la compra por el grupo informático estadounidense del fabricante finlandés de teléfonos móviles Nokia.

Al final Samsung pagó pero se niega a abonar indemnizaciones por sus atrasos en los pagos y amenaza, según Microsoft con romper de nuevo el contrato.

La cotización del surcoreano perdió un 1,22% en la Bolsa de Seúl el miércoles.