Una reciente exclusiva sobre el funcionamiento interno de los servicios de inteligencia estadounidenses convenció a altos funcionarios de la existencia de un nuevo filtrador de información a la prensa, informó un reporte difundido este martes.

Las sospechas se originaron después de que The Intercept, una nueva página con acceso a documentos del exanalista de inteligencia Edward Snowden, publicara revelaciones sobre las bases de datos del gobierno con nombres de sospechosos clasificados como “terroristas”.

El informe de The Intercept fue “obtenido de una fuente de la comunidad de inteligencia”. La publicación no ocultó previamente que Snowden era su fuente, sugiriendo que la última exclusiva procede de otra persona.

La cadena CNN, citando sólo a “funcionarios de Estados Unidos”, reportó que las autoridades temen estar enfrentando a una nueva fuente de filtraciones de material de inteligencia clasificado, procedente de sus propias filas.

El documento publicado por The Intercept se titula “Directorio de Logros Estratégicos de Identidades Terroristas 2013″ y está fechado en el mes de agosto, después de que Snowden abandonara Hawai, lugar donde trabajaba como contratista para la Agencia de Seguridad Nacional, antes de huir a Hong Kong y luego a Rusia.

El informe revela que existen al menos 680.000 nombres de individuos en todo el mundo que Estados Unidos sospecha están involucrados en actividades terroristas.

Entre ellas, 280.000 no tienen “afiliaciones reconocidas a grupos terroristas”. Otros son supuestos miembros o seguidores de grupos considerados como tal por Washington, como por ejemplo Al Qaida o Hamas.

The Intercept es un medio editado por el periodista estadounidense Gleen Greenwald, quien reveló algunos de los primeros documentos secretos filtrados por Edward Snowden.