Desde la semana pasada, comenzó a gestarse en Chile un verdadero “boom” en torno a una particular edición de una de las monedas locales: la de $500.
Tal como informó BioBioChile hace algunos días, se trata del ejemplar de este valor que fue emitido el 2000 y que tiene dicho año impreso en ambas caras, tal como se ve en la imagen más abajo.
Tras conocerse la noticia, muchos usuarios se lanzaron en la búsqueda de la pieza, hurgando sus monederos o verificando cada vez que le pasaban el vuelto, sin embargo, se desconocía si se había hallado alguno de los escasos ejemplares de la la particular moneda… hasta ahora.
Lo anterior, porque esta semana una de las preciadas piezas llegó a manos de una trabajadora de un hogar de ancianos en Valparaíso, quien la recibió como vuelto tras pagar su pasaje en un colectivo.
Se trata de Paola Baeza Durán, quien comentó a Las Últimas Noticias que el hecho ocurrió cuando ella y su cuñada, quien también trabaja en el hogar, se trasladaban con tres abuelitos a un control de salud.
Pagaron los pasajes entre las dos y, al recibir la moneda, su cuñada la encontró extraña y pensó que era falsa. Pero Paola la miró con detención, percatándose de que se trataba del ejemplar buscado por los coleccionistas.
Tras infructuosos intentos por ofrecerla en Internet y a la Asociación Numismática de Chile (Anuch), quien no se interesó en comprarla, ella y su cuñada se la vendieron a un anticuario de la Plaza O’Higgins de Valparaíso.
Sin embargo, no le pagaron 300 mil como algunos aventuraban, sino que sólo 100 mil pesos que dividieron entre ambas: “Mi cuñada quería venderla a toda costa. Si yo hubiese tenido el dinero, le paso los 50 mil y me quedo con la moneda. Porque imagino que cuando pase el boom y la gente se olvide va a volver a costar más cara. Sé que le pudimos sacar mucho más”.
Pese a ello, la mujer agradeció haberse encontrado el ejemplar: “Es como si me hubiese caído del cielo”, afirmó.