Más de 700 millones de mujeres en el mundo han sido casadas cuando eran niñas, denunció el martes Unicef, que organiza en Londres una conferencia sobre la lucha contra los matrimonios forzados y la mutilación genital femenina.
La conferencia, titulada “Girl Summit 2014″, está coorganizada por el primer ministro británico, David Cameron, y es la primera de este tipo, según el Fondo de Naciones Unidas para la infancia UNICEF.
Su objetivo es lograr apoyar en todo el mundo para poner fin a los matrimonios forzados y la ablación de clítoris, que afecta a más de 130 millones de mujeres y niñas en los 29 países de África y Oriente Medio, donde su práctica es más frecuente, según Unicef.
La cumbre redactará una “Carta Internacional” pidiendo el fin de estas prácticas y nuevos programas para prevenir los matrimonios forzados y de niñas en 12 países en desarrollo.
Entre los participantes en la conferencia se encuentra el padre de Malala Yusafzai, la niña paquistaní que sobrevivió a un ataque de los talibanes y se ha convertido en una militante a favor de que las niñas puedan tener acceso a la escuela.
Según nuevos datos de la agencia de la ONU, entre los 700 millones de mujeres víctimas de matrimonio forzado, más de tercio (250 millones) eran menores de 15 años cuando se casaron.
Sobre las mutilaciones genitales especialmente practicada en 29 países de África y de Oriente Medio, Unicef apunta a una mejora de la situación, afirmando que el riesgo para una adolescente de sufrir mutilación genital se ha reducido en un tercio en 30 años.
“Pero sin acciones inmediatas mucho más intensas y apoyadas por parte de todos los actores sociales, cientos de millones de niñas van a seguir sufriendo heridas profundas, permanentes y totalmente inútiles”, advirtió Unicef.
“Las niñas no son la propiedad de nadie, tienen derecho a elegir su destino. Cuando lo hacen, todo el mundo sale beneficiado”, declaró el director general de Unicef, Anthony Lake, en un comunicado.
El gobierno británico anunciará durante el día una nueva legislación que castigará en el Reino Unido a los padres que no impidan la ablación del clítoris de su hija.
“Todas las niñas tienen derecho a vivir libres de toda violencia y toda coerción, sin ser forzadas al matrimonio o a los efectos físicos y psicológicos de por vida de una mutilación genital femenina”, indicó Cameron en un comunicado.
“Prácticas aberrantes como estas, por muy arraigadas que estén en una sociedad, violan los derechos de las niñas y de las mujeres en todo el mundo, incluido aquí en el Reino Unido”, añadió.
“Quiero construir un futuro mejor para todas nuestras niñas y acogo hoy el Girl Summit para que podamos decir con una sola voz: acabemos con las prácticas de una vez por todas”.
A principios de julio, un informe del parlamento británico tildó de “escándalo nacional” el fracaso por parte de las autoridades británicas de acabar con la ablación del clítoris, que en el Reino Unido concierne a 170.000 mujeres.
Las mutilaciones genitales femeninas implican todas las intervenciones que consisten en retirar totalmente o parcialmente los órganos genitales externos de la mujer por motivos culturales o religiosos.
Pueden provocar graves hemorragias, problemas urinarios y, con el tiempo, quistes, infecciones, esterilidad y complicaciones durante el parto.