La PDI empadronó nuevamente a los vecinos del domicilio donde ayer fueron asesinados una asesora del hogar y el hijo de los dueños de casa. Las pesquisas policiales mantienen un férreo hermetismo con el objetivo de conseguir una pista que conduzca a los responsables de los horrendos crímenes.
La Brigada de Homicidios de la PDI empadronó a varios vecinos de la casa asignada con el 3366 del pasaje Ricardo Elatchmann, del sector Las Salinas de Talcahuano.
El objetivo es precisar los relatos ya entregados ayer y establecer si alguien oyó o vio algo, lo que todavía parece no encontrar novedades, algo sin duda llamativo debido a la brutalidad con que actuaron él o los responsables.
Roxana, por ejemplo, fue una de las vecinas entrevistadas por la PDI, quien recordó que ayer salió a la calle para ver cómo el padre del pequeño Matías Poblete, de 10 años, lo llevaba en brazos y luego en su auto hasta el cercano consultorio Leocán Portus.
El comisario José Carmona valoró la colaboración de los vecinos y descartó que las víctimas fuesen ultimadas con un arma de fuego.
Los homicidas usaron armas corto punzantes y elementos contundentes para acabar con la vida de Matías, estudiante de cuarto básico del colegio La Asunción, y de Cristina del Carmen Tapia Hormazábal, de 58 años, su nana desde hace tres años.
Eduardo Vivanco, abogado y cercano a la familia de Cristina, recordó el cariño que la mujer guardaba a los tres jóvenes de la familia.
Las diligencias prosiguen en el sector como en otros puntos de la ciudad, sin que hasta ahora se conozca de un detenido.
La policía no confirmó si ayer la madre del menor fue víctima del robo de su cartera, en las cercanías del domicilio, o si eso podría estar vinculado a los homicidios. Tampoco si fueron robadas especies como computadores desde el domicilio.