Las parejas del mismo sexo que deseen casarse en Florida, Estados Unidos, deberán esperar hasta que se decida una apelación de la fiscal del Estado contra una decisión que la semana pasada autorizó esos matrimonios, indicó un juez el lunes.
El juez Luis García del condado de Monroe, que abarca principalmente a los cayos del sur de Florida, negó este lunes una petición de emergencia de una pareja de hombres que le solicitaron que autorizara su matrimonio.
De esa manera, García se negó a revocar la suspensión de los matrimonios gay que se activó automáticamente cuando apeló la fiscal de Florida, Pam Bondi.
“La suspensión automática, actualmente vigente, deberá mantenerse hasta tanto se complete el procedimiento de apelación”, indicó en su decisión el juez García.
“En base a decisiones de la Corte Suprema de Estados Unidos y otras cortes en cuanto a suspensiones en apelaciones similares, esta corte niega la moción de emergencia”, señaló.
El propio juez García fue el autor de la decisión que el jueves pasado declaró inconstitucional la prohibición de matrimonios entre personas del mismo sexo en el estado, instaurada en 2008 en un referéndum aprobado con más de 60% de los votos.
En esa decisión, García ordenó a los funcionarios del condado de Monroe, donde tiene jurisdicción, que a partir de este martes emitieran los certificados de matrimonio a las parejas gay, pero la apelación de la fiscal Bondi detuvo esa posibilidad.
La Corte Suprema estadounidense decidió en junio de 2013 que las parejas homosexuales tienen las mismas indemnizaciones federales que las parejas heterosexuales, pero las leyes sobre matrimonio siguen siendo un asunto estatal.
El matrimonio gay en Estados Unidos es legal actualmente en 19 estados y en Washington (Distrito de Columbia).