Dieciséis personas murieron y 81 resultaron heridas en choques registrados en Bengasi, en el este de Libia, entre el Ejército regular y grupos islamistas, según fuentes médicas y militares.
“La mayor parte de los muertos y heridos son militares. Tres civiles, incluyendo un egipcio, murieron al impactar un cohete en su casa”, indicó a la AFP una fuente hospitalaria que requirió anonimato.
Según un responsable militar, los enfrentamientos se produjeron después de un ataque del Consejo de Shura de los revolucionarios de Bengasi, una alianza de milicias islamistas y yihadistas, contra un cuartel del ejército.
Cinco soldados murieron en el ataque, al que siguieron violentos combates entre las fuerzas especiales del Ejército y milicias islamistas que dictan la ley en Bengasi, principal ciudad del este libio, desde la caída del régimen de Muamar Gadafi en 2011, según dicho responsable.
En la ciudad se producen casi a diario enfrentamientos entre el ejército y grupos radicales, entre ellos Ansar Asharia, que Estados Unidos cataloga como organización terrorista.
Un general retirado, Jalifa Haftar, realiza desde el 16 de mayo una operación contra los grupos “terroristas” en el este libio.
Acusado de golpista por sus detractores, el general disidente cuenta con el apoyo de varias unidades del ejército regular libio, incluyendo las fuerzas aéreas.
En paralelo, violentos choques enfrenten desde el 13 de julio a milicias rivales por el control del aeropuerto Trípoli en el marco de una lucha de influencia política y regional.
Estas violencias pueden sumir al país en una guerra civil ante la debilidad de las autoridades de transición, que hasta el momento han fracasado a la hora de construir un ejército y una policía profesionales.