Este martes se desarrolla la cuarta jornada de audiencias en el Tribunal de Valparaíso en el denominado Segundo Fraude a la Intendencia, donde se busca aclarar la participación y responsabilidad de los ex funcionarios de la entidad.
El ex jefe de gabinete de la Intendencia, Enrique Kittsteiner, reconoció que debió cambiar de abogado por un tema personal; su anterior defensor -Edgardo Piqué- habría iniciado una relación amorosa con su ex pareja mientras estaba privado de libertad. Ello, a su juicio, derivó en una mala asesoría legal.
El actual abogado de Kittsteiner, Gonzalo Ángel, aclaró en primera instancia que por las manos de su defendido nunca pasó dinero, junto con reafirmar la versión del imputado sobre el cambio en su defensa.
Si bien este antecedente puede tratarse de algo íntimo y sin relevancia para el caso, el defensor explicó que sí es relevante debido a que ello implicó que su defendido estuviera sujeto a una deficiente asesoría.
Respecto al caso, el abogado acusó al Ministerio Público de querer sensacionalizar la figura de Enrique Kittsteiner, calificándolo como un alto funcionario de la Intendencia. Sin embargo, señaló que el ex jefe de gabinete solo cumplió órdenes informales emanadas del ex intendente Raúl Celis.
Javier Rojas Mery, abogado del Consejo de Defensa del Estado, indicó que de acuerdo a la declaración de uno de los testigos, una auditoria interna de la Intendencia arrojo como resultado la existencia de alrededor de $1.200 millones en proyectos objetados. Sin embargo, esto deberá ser investigado para saber con certeza cuantos de estos son parte del fraude.
Durante la jornada declaró Renzo Muñoz, ex vicepresidente de Valparaíso Joven (una de las entidades investigadas en el fraude) en calidad de testigo, quien señaló ante el tribunal no tener conocimiento del tema hasta que la Policía de Investigaciones en marzo pasado lo citó a un interrogatorio.