Un helicóptero de la Armada estadounidense ubicó a un yate desaparecido en el Atlántico, pero no encontró rastro de sus cuatro tripulantes británicos y ahora se teme que hayan muerto, dijeron el viernes funcionarios norteamericanos.
El casco volcado del yate Cheeki Rafiki fue localizado a 1.000 millas náuticas (unos 1.850 kilómetros) de la costa del estado de Massachusetts.
En el interior de la nave, los equipos de búsqueda localizaron el bote salvavidas asegurado en su espacio de almacenamiento “lo que indica que no fue utilizado para caso de emergencia”, dijo la Guardia Costera en un comunicado, en lo que sería una indicación más de que la tripulación no logró salir con vida.
La información fue compartida con las familias de los tripulantes.
La búsqueda de la nave y sus cuatro marinos desaparecidos tras el naufragio en el Atlántico fue desplegada después de que 150.000 personas firmaran un petición en Gran Bretaña, para que se continuara con las tareas.
El yate de 12 metros de eslora regresaba de una regata de la isla caribeña de Antigua, cuando comenzó a hacer agua el 15 de mayo, a unas 600 millas náuticas al este de Cape Cod. Se perdió el contacto al día siguiente.
“Los tripulantes navales (del helicóptero) observaron que la quilla del velero se rompió, causando una brecha en el casco”, dijo la Guardia Costera estadounidense.
Un nadador de superficie “testimonió que el camarote del barco se inundó y las ventanas estaban hechas añicos, lo que contribuyó a la inundación completa del interior”, añadió.
El cuerpo de Guardacostas había anunciado que se suspenderían los rastreos a la medianoche del viernes si no había signos de que la tripulación podría estar viva.