El seremi de Salud de la Región Metropolitana, Carlos Aranda, efectuó un recorrido por stands de la “Expo Tattoo Santiago”, que se realizará hasta el domingo en dependencias del Club Hípico, y expresó que Chile cuenta con un reglamento para la realización de tatuajes, y llamó a que éste se cumpla, junto con entregar recomendaciones.
La Autoridad Sanitaria explicó que los establecimientos que realizan estas prácticas no requieren de una autorización sanitaria, sin embargo el seremi de Salud puede fiscalizar y sancionar las infracciones a las disposiciones del Reglamento y del Código Sanitario.
Las infracciones son por no acreditación de conocimientos de técnica aséptica, personal no vacunado contra la hepatitis B, no disponer de manuales de procedimientos, no contar con lavamanos ni área de lavado de material, falta de aseo en superficies de trabajo, no contar con dispositivo para la eliminación del material corto punzante, registros incompletos y extintores con carga vencida o ausencia de ellos.
Manifestó también que este tipo de actividades se deben efectuar en un recinto especial con lavamanos, superficies de trabajo lavables, con área de lavado de material e instrumental separada del lavamanos, con buena iluminación, mobiliario cerrado y dispositivo para el desecho del material usado, separado del material corto punzante y no corto punzante.
Además, deben contar con manuales de procedimientos sobre normas técnicas dictadas por el ministerio de Salud.
Igualmente, los menores de edad, que deseen someterse a este procedimiento, deben presentar una autorización por escrito de su representante legal y éste debe acompañarlos durante todo el procedimiento.
En tanto, la dirección técnica de estos establecimientos debe estar a cargo de una persona mayor de edad, que acredite ante la Autoridad Sanitaria conocimientos sobre esterilización, técnica aséptica y precauciones universales con sangre y fluidos corporales. Las personas que efectúan los procedimientos también deberán ser mayores de edad y estar vacunadas contra la hepatitis B.
Bajo ninguna circunstancia se realizarán procedimientos de este tipo si la piel o mucosa que serán intervenidas tienen un proceso infeccioso u otro tipo de lesión, tal como pústulas, abscesos, acné o dermatitis (inflamación de la dermis).
Otros aspectos a tener en cuenta es que todo el material que se utilice para atravesar la piel deberá ser estéril, en conformidad con las Normas de Esterilización vigentes del ministerio de Salud. Del mismo modo, el material desechable es de un sólo uso. Las tintas o pigmentos que se usarán deberán ser no tóxicos y se deberá ajustar a la nómina de colorantes permitidos en productos farmacéuticos vigentes.
El establecimiento llevará un registro foliado donde conste la identificación del cliente, con el fin de detectar a las personas afectadas en caso de detectarse riesgos sanitarios relacionados con los procedimientos.
Además de las normas básicas de higiene y control es también recomendable tener presente otros factores, entre ellos: la tinta que se utilizará; el tamaño del dibujo y el lugar del cuerpo donde se tatuará (considerando el paso de los años y los cambios físicos); y el tipo de piel, para lo que se recomienda hacer una prueba de alergia al pigmento 24 horas antes.
El riesgo no sólo depende de la práctica del tatuaje en sí, sino de la forma de trabajar de cada tatuador. Un estudio profesional que cumpla la normativa y actúe de forma ética y correcta no tiene por qué acarrear algún peligro.
En los llamados tatuajes temporales o de henna se usan unas tintas vegetales o minerales que, a pesar que no profundizan en la piel como lo hacen los tatuajes permanentes, no dejan de ser tintas que marcan la piel por algunos meses.
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