Con la presencia del Ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Andrés Gomés-Lobos; el Seremi de la misma cartera, Matías Salazar, se realizó la inauguración de FENATRAN CHILE ANAC 2014.
En el Gran Salón de Espacio Riesco, con la presencia de más de mil invitados, se realizó la inauguración de FENATRAN CHILE ANAC 2014. Entre los asistentes destacó la presencia del ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Andrés Gomez-Lobos, quien inauguró el evento, y el SEREMI de Transportes de la Región Metropolitana, Matías Salazar.
La muestra se realiza en el Centro de Convenciones Espacio Riesco, donde se dispone de 70.000 metros cuadrados para las 52 marcas de buses, camiones y vehículos comerciales que dan vida a la muestra más diversa de la región y donde se espera la visita de 15 mil personas.
En la jornada inaugural, el presidente de la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC), Álvaro Mendoza, destacó la instancia que representa FENATRAN CHILE ANAC 2014 para los distintos actores del sector, desde las marcas de vehículos, hasta los gremios presentes en la muestra.
“FENATRAN CHILE 2014 se levanta por primera vez como una feria internacional que se diferencia y destaca de otras ferias del mundo por una característica esencial y notable: se trata de la exhibición más diversa del orbe. Pero hay más. Se trata de una feria en la que participan activamente todos los actores del rubro: los constructores de vehículos comerciales de transporte; los transportistas; los gremios y los entes reguladores, convergiendo simultáneamente en una instancia de diálogo y encuentro profesional, realmente global y multidimensional”, dijo Mendoza.
El máximo ejecutivo de ANAC también aprovechó para expresar su preocupación respecto del impuesto que se le pretende aplicar en la Reforma Tributaria a los vehículos diésel.
“Ciertamente, este es un proyecto de norma erróneo, malo para Chile y que no debe prosperar”, indicó, agregando que “la autoridad debe comprender que esta clase de normativas específicas, cuando surgen sin los estudios técnicos adecuados ni un mínimo de discusión de sustento, pueden llegar a producir efectos muy negativos y a niveles insospechados. Aquí se hallan en juego, por una parte, las planificaciones industriales y comerciales de muchas empresas y personas tanto de Chile como de nuestros países socios; planes de producto y compromisos internacionales de fabricación, y por la otra, el compromiso asumido en Copenhague 2009 por nuestra nación, de rebajar en un 20% al año 2020, las emisiones de gases de efecto invernadero, Co2, el cual sólo podrá alcanzarse si se mantiene e intensifica la incorporación de motores diésel ultra limpios a nuestro mercado”.
