Poco se sabe de la abundante presencia de tiburones en las costas chilenas, menos aún de su matanza involuntaria a manos de la industria pesquera. Es por ello que la organización internacional Oceana pidió a las autoridades tomar medidas para proteger este especie.
La ONG pidió al Subsecretario de Pesca, Raúl Súnico, la adopción de medidas urgentes frente a los altos índices de pesca incidental de tiburones que produce la pesquería de pez espada en el norte del país, que presenta niveles inusualmente altos de captura de estos animales, especialmente de azulejos y marrajos.
“Estas especies están amenazadas en el mundo entero y, por el importante rol que cumplen en el ecosistema, debemos evitar por todos los medios que sigan disminuyendo”, señaló el director ejecutivo de Oceana, Álex Muñoz.
Aseguran que la mortandad se debe a que en aquella pesquería se utiliza alambre de acero para unir el anzuelo con la línea principal. Una vez que los tiburones lo muerden, son incapaces de cortarla y escapar, como sí sucede cuando el reinal es de nylon.
Las cifras expuestas por Oceana hablan de una pesca incidental de tiburones de un 50%, 42% y 32% para los años 2006, 2007 y 2008, respectivamente. Es decir, según los datos más alarmantes, de cada 10 ejemplares capturados, 5 son tiburones y no la especie objetiva.
“Chile dio un paso importante el 2011 al aprobar la ley que prohíbe el aleteo de tiburones (cuando les cortan las aletas y los arrojan al mar). Pero es urgente dar un nuevo paso para proteger a los tiburones de la amenaza de la pesca incidental asociada a las pesquerías de nuestro país”, agregó Muñoz.
Oceana advierte que la disminución del tiburón puede desestabilizar la cadena alimentaria y provocar impactos ecológicos negativos en las estructuras y las funciones de las comunidades y ecosistemas marinos.