El Nobel de Literatura colombiano Gabriel García Márquez sigue evolucionando favorablemente y ya “tiene ganas de irse a casa” luego de cinco días hospitalizado en Ciudad de México por una infección pulmonar y urinaria, informó este sábado su familia.

“Evoluciona bien y tiene ganas de irse a casa”, dijo su hijo Gonzalo García Barcha a la salida del prestigioso Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (público), ubicado en sur de la capital, donde se encuentra ingresado el autor.

Aunque uno de sus asistentes personales había dicho que este sábado el escritor de 87 años podía llegar a salir del centro médico, Gracía Bracha insistió en que probablemente recién el martes pueda hacerlo.

El lunes pasado, el autor de “El amor en tiempos del cólera” ingresó al hospital por “un cuadro de deshidratación y un proceso infeccioso pulmonar y de vías urinarias”, según la secretaría de Salud.

El viernes, haciendo gala de su buen humor, el Nobel habría pedido a su asistente Genovevo Quirós que dijera a los reporteros:”Están ustedes locos, ¿qué están haciendo tanto tiempo aquí afuera? ¡Ya váyanse a trabajar!”.

Afincado en México desde hace más de tres décadas, García Márquez ha vivido los últimos años retirado de la vida pública y en sus escasas apariciones ha preferido no hacer declaraciones a la prensa.

Durante este tiempo se ha informado que el novelista tiene problemas de memoria y su hermano Jaime comentó en julio de 2012 que padecía “demencia senil”.

El colombiano es considerado una de las principales plumas de la historia de la literatura en español. Es el autor de algunas de las novelas más aplaudidas del siglo XX, como su obra cumbre, “Cien años de soledad” (1967), que ha vendido más de 30 millones de ejemplares y ha sido traducida a 35 idiomas.