El ministro japonés de Relaciones Exteriores canceló una visita a Rusia prevista en abril, para protestar contra la anexión de la península de Crimea por parte de Moscú.

Según el periódico Yomiuri Shimbun, el gobierno japonés tenía previsto enviar al ministro Fumio Kishida a reunirse con su homólogo ruso Serguei Lavrov, pero finalmente decidió anular la visita para evitar las críticas de sus socios europeos y estadounidenses.

La semana pasada, el G7, que reúne a los países más industrializados del mundo (Estados Unidos, Alemania, Canadá, Francia, Gran Bretaña, Italia y Japón), decidió suspender su participación en la cumbre del G8 (G7+Rusia) que organizaba Rusia en Sochi por la crisis en Ucrania.

Preguntado por la AFP, un responsable del ministerio de Relaciones Exteriores dijo que todavía no está decidido si se mantiene el viaje del ministro.

Japón se ha comprometido con sus aliados en la respuesta a la crisis de Crimea a pesar de que el país es muy dependiente del gas natural ruso y de que su primer ministro, Shinzo Abe, tienen buenas relaciones con el presidente Vladimir Putin.