Dos exresponsables del banco del Vaticano serán juzgados por blanqueo de dinero, indicó este viernes la justicia italiana.

Paolo Cipriani, exdirector general del banco, oficialmente llamado Instituto para las Obras de Religión (IOR), y su adjunto Massimo Tulli están acusados en un caso que llevó a decomisar 23 millones de euros (unos 32 millones de dólares).

La prensa italiana citó a fiscales según los cuales Cipriani y Tulli aprobaron un pago sospechoso mientras que el expresidente del banco, Ettore Gotti Tedeschi, intentó por el contrario aplicar las leyes contra el blanqueo.

Los dos hombres tuvieron que dimitir el año pasado tres días después de que un contable del Vaticano, monseñor Nunzio Scarano, que tenía cuentas en el banco, fuera detenido en Italia por transferencias sospechosas.

Gotti Tedeschi, despedido en 2012, fue luego declarado inocente.

El banco, que gestiona las cuentas de religiosos y congregaciones católicas en todo el mundo, tiene muy mala reputación, pero el Vaticano ha prometido luchar contra la corrupción y aplicar las leyes internacionales.

En 2012 el IOR tenía cerca de 6.300 millones de euros en activos y unos 18.900 clientes.