La Comisión Interamericana de Derechos Humanos dictó este lunes medidas cautelares a favor de tres opositores, incluyendo un parlamentario, acusados de injuriar al presidente ecuatoriano Rafael Correa.
La Comisión, órgano autónomo de la OEA, solicitó al Estado de Ecuador que “suspenda inmediatamente” los efectos de una sentencia de enero que ratificó una condena a pena de cárcel para el parlamentario Cléver Jiménez, su asesor y periodista Fernando Villavicencio, y Carlos Figueroa.
En un documento de 16 páginas, la CIDH considera que “la condena penal privativa de la libertad en el presente asunto genera un grave riesgo de daño irreparable a la libertad de expresión”.
Además tendría un “efecto intimidatorio” en los afectados y también en otros periodistas y legisladores, y en otras personas que pretendan denunciar a funcionarios públicos, según la resolución, aprobada en una votación de 5 a 2.
Jiménez, Villavicencio y Figueroa fueron condenados en 2013 en un juicio planteado por el mandatario por calumnias.
En 2011, el diputado denunció a Correa ante la Fiscalía por presuntos delitos de lesa humanidad tras acusarlo de ordenar a las Fuerzas Armadas rescatarlo a sangre y fuego de un hospital en Quito, donde el gobernante se había refugiado de una rebelión policial en 2010, que dejó 10 muertos.
Jiménez se encontraba en una provincia amazónica del sureste ecuatoriano, junto a Figueroa, dijo a la AFP su abogado, Julio César Sarango el viernes, cuando Correa anunció la orden de captura contra el congresista.
Mientras tanto, Villavicencio está desde hace más de un mes refugiado en Estados Unidos, de acuerdo con Sarango.