La justicia alemana anunció este lunes que no recurrirá la sentencia por fraude fiscal contra el presidente del Bayern Múnich, Uli Hoeness, dejando la puerta abierta al ingreso en prisión del dirigente del prestigioso club alemán.
“La fiscalía de Múnich no apelará contra la sentencia por fraude fiscal referente a Ulrich Hoeness”, informó esta instancia judicial en un comunicado.
La fiscalía había reclamado una pena de cinco años de prisión por fraude fiscal que ascendía a 28,5 millones de euros, un delito por el que Hoeness fue condenado la semana pasada a tres años y medio de prisión.
Tras conocer la sentencia por un delito reconocido por el mismo Hoeness, el presidente del Bayern anunció el viernes que no apelaría la condena y que dimitiría como presidente del Bayern.
El día exacto del ingreso en prisión de Hoeness aún no se conoce puesto que la sentencia aún no es formalmente ejecutoria, aunque los expertos señalan que es cuestión de semanas.
Nunca antes en la historia del fútbol europeo, el presidente de un club de este prestigio e importancia había estado en el centro de un escándalo de este tipo y, mucho menos, había acabado en prisión.
“Esta evasión fiscal es el error de mi vida. Saco las consecuencias de este error”, admitió Hoeness el pasado viernes.
El caso estalló a principios de 2013, cuando la prensa reveló que un importante directivo del mundo del fútbol había ocultado una gran suma de dinero en Suiza.
Uli Hoeness, de 62 años, optó inmediatamente por denunciarse a sí mismo para regularizar su situación mediante el pago de una multa, pero el tribunal mostró sus dudas desde el principio sobre la exhaustividad de su confesión.
Si bien la justicia comenzó acusándole de haber evadido 3,5 millones de euros, esa cantidad fue ascendiendo a medida que avanzaba el juicio hasta los 28,5 millones.