Desde Santiago, Claudio Carrasco nos envía estas imágenes y la siguiente descripción:
Ciudad Empresarial, una autodenominada ciudad que entre otras cosas se jacta de ser un lugar ideal, accesible y “seguro” para trabajar. Sin embargo la realidad dista mucho de estos conceptos, ya que últimamente hay que tolerar su mala accesibilidad y sus desvíos de tránsito no autorizados en las horas punta.
Además de eso ahora, durante las mañanas debemos coexistir con los caballos sueltos en sus calles y jardines, algunos de los cuales caminan despreocupados por en medio de la vía, siendo los automovilistas los que debemos esquivarlos, con el riesgo de provocar un accidente o que alguno de ellos se asuste y embista contra los automóviles o los escasos peatones a esa hora.
Creo que es tiempo que los gerentes de este lugar asuman la condición real de este lugar, y se hagan cargo de los problemas que presenta. Aclaro que esto no significa de manera alguna sacrificar estos animales, pero si procurar que no estén sueltos en la vía publica.