En noche buena, en el Hospital Van Buren de Valparaíso, se celebra igual que en los hogares de muchos porteños la navidad, un momento especial con la familia, ejemplo que dio claramente María Úbeda, quien sorprendió a su hija, Esperanza Úbeda, de 16 años, que se encuentra internada hace nueve meses en el centro asistencial.

Para dar la sorpresa a su hija, María tuvo que viajar desde San Antonio, traslado que hizo porque considera que siempre el “hoy” es tiempo para dar amor a la familia.

Viaje que toma un valor importante, ya que Esperanza está inválida y presenta una notoria deformidad física producto de la hidrocefalia, un trastorno cuya principal característica es la acumulación excesiva de líquido en el cerebro, a lo que se suma la mielomeningocele,una anomalía del tubo neural en la cual los huesos de la columna no se forman completamente, por lo que María considera que cada momento que da a su hija es de vital importancia.

De esta experiencia y lección de vida fue participe el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, quien en noche buena fue a entregar regalos a los niños del hospital que viven una realidad totalmente diferente a la de Esperanza, porque muchos la pasan solos, sin sus familias.

En la oportunidad, se repartieron más de 100 juguetes para los niños que se encuentran internados en el hospital, quienes también son apadrinados por las enfermeras quienes los cuidan y se encargan de darles un momento especial.