El Consejo de seguridad de Naciones Unidas autorizó este martes el envío de cerca de 6.000 cascos azules suplementarios para reforzar la misión de la ONU en Sudán del Sur (Minuss) y permitir brindar mayor protección a los civiles.

El Consejo adoptó por unanimidad de sus 15 miembros una resolución que eleva el techo autorizados de efectivos militares de la Minuss de 7.000 a 12.500 soldados. El número de policías alcanzará además a 1.323 hombres frente a los 900 efectivos actuales.

La Minuss se convertirá así en la tercera misión de mantenimiento de la paz de la ONU en el mundo en cuanto al número de cascos azules, tras las de la República Democrática del Congo y Darfur.

Los refuerzos, que comprenderán helicópteros de combate y de transporte y expertos en derechos humanos, se tomarán de otras misiones de la ONU en África (República Democrática del Congo, Costa de Marfil, Darfur, Liberia). Pero la resolución 2132 precisa bien que este despliegue está sometido a revisión.

El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, advirtió al Consejo de que este despliegue “no se hará de un día al otro” y que la ONU “no puede proteger a todos los civiles” en el país.

El Consejo exige también el cese inmediato de las hostilidades entre las fuerzas leales al presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, y su rival, el vicepresidente Riek Machar y demanda “la apertura inmediata de un diálogo” entre ambos.

Su comunicado expresa “una grave alerta y preocupación sobre el rápido deterioro de la seguridad y la crisis humanitaria” y advierte que los responsables de crímenes de guerra serán juzgados.