Nuevamente los lobos marinos generaron inconvenientes en Talcahuano, luego que uno de ellos saliera a la calle generando expectación entre automovilistas y peatones. La Armada sostuvo que carece de responsabilidad en la salida de los animales desde el agua, aunque coordina reuniones con otros organismos para prevenir mayores problemas.
La preocupación final son los posibles ataques de los lobos marinos a las personas o agresiones contra los mismos animales. Por eso la situación vivida hoy, en que un lobo marino se paseó por Blanco Encalada hasta la plaza del Ancla, replanteó las medidas de seguridad que impiden la salida de los lobos desde el mar, que para algunos vecinos del puerto, como Juan Arias, es el resultado de alimentarlos con desechos de los puestos de mariscos y pescados.
Pero Daniel Jara, un vendedor de pescados y mariscos, negó que ellos alimenten a los lobos marinos y que, en este caso, el lobo quedó encerrado en el lugar donde existe un contenedor para dejar los desperdicios de los productos marinos.
Bernardo Maldonado, otro vendedor, se explica el comportamiento de los lobos porque carecen de comida en el mar o los barcos pesqueros ya no regresan con peces.
Pero ¿quién se hace responsable de la salida a la calle de los lobos marinos, con el peligro de ataque como ocurrió a un adulto mayor hace algunos días?
El gobernador marítimo de Talcahuano, Luis Felipe Gracia, sostiene que en la Armada no recae esa responsabilidad, pero que igualmente coordinan reuniones con otros organismos, como municipio, Codeff y la empresa que moderniza la poza, para encontrar una solución.
También extendió un llamado a la comunidad y visitantes para que no arrojen comida a los lobos, ya que asegura que hay quienes compran cabezas de pescado para lanzarlas a los animales.
http://youtu.be/B0_u_hY5pxQ