Enfrentamientos entre la policía y varios cientos de manifestantes se produjeron el domingo por la noche en París al final de una manifestación de opositores a la ley de matrimonio homosexual, que había reunido decenas de miles de personas, constató la AFP.

Los manifestantes lanzaron todo tipo de objetos, desde barreras de seguridad hasta botellas de cerveza, contra los policías, que utilizó abundantes gases lacrimógenos en las escaramuzas en los alrededores de la explanada de los Inválidos, en París.

En un comunicado, el ministro del Interior, Manuel Valls, responsabilizó por los enfrentamientos a la “extrema derecha” y a grupos identitarios.

“Estos incidentes fueron causados por cientos de personas, en su mayoría de extrema derecha y de movimientos identitarios, que agredieron violentamente a los policías, cuatro de los cuales resultaron heridos, a los gendarmes y a los periodistas”, señala el comunicado.

La policía arrestó a 293 personas, de las cuales 231 quedaron detenidas, dijo a la AFP la prefectura de policía, precisando que unos 200 fueron detenidos en los alrededores de Inválidos.

Seis personas resultaron con heridas leves, cuatro policías, un fotógrafo de AFP y uno de los manifestantes, dijo la prefectura de policía. En total se movilizaron 4.500 policías y gendarmes.

La manifestación había empezado a primeras horas de la tarde en calma, con la participación de 150.000 personas, según la policía, y un millón, según los organizadores.

Prometida por el presidente François Hollande durante su campaña electoral y defendido por toda la izquierda francesa, la ley que autoriza el matrimonio y la adopción para las parejas del mismo sexo fue adoptada por el Parlamento el 23 de abril y promulgada el 18 de mayo.

El texto suscitó una fuerte oposición en Francia, en particular de la oposición de derecha y de los medios católicos.

Lanzado el año pasado con el objetivo de oponerse a la ley a través de manifestaciones masivas pero pacíficas, el colectivo Manifestación para Todos se ha visto desbordado por elementos radicales, y en los últimos meses las diversas manifestaciones dieron lugar a acciones violentas e incluso a agresiones a homosexuales.

La propia portavoz del colectivo, Frigide Barjot, se declaró amenazada y renunció a participar en la manifestación.

En los últimos días, las autoridades francesas multiplicaron las advertencias sobre los riesgos de provocaciones.