Desde Concepción, Ivonne Rodriguez nos envía estas imágenes y la siguiente descripción:
Hace algunos días, luego de ir a dejar a unos amigos al Parque Residencial las Amapolas en Talcahuano, me percaté del peligroso estado de la calle anexa (en este caso debiera ser una vereda) por la que circulaban vehículos y peatones a esa hora de las noche.
Al parecer a “alguien” le pareció inteligente dividir la calle con lo que parece ser un recolector de aguas lluvias bastante profundo y de largo tramo. La situación no deja de ser inquietante al percatarme que niños pequeños jugaban cerca, y que una sola caída o resbalo podría significarles graves lesiones.
Además a cualquier conductor sin experiencia por esos lados podría resultarle peligroso que exista tamaña monstruosidad que a la hora de doblar mal o pretender estacionarse en el costado sin percatarse o sin luminosidad (como ya ha pasado). Lo dejaría con el auto atascado y en una difícil situación.
En fin, tamaña fue mi sorpresa al percatarme de la situación por lo que lo expongo aquí y espero que las autoridades corrijan esta situación antes de que sucedan hechos que lamentar.