Los padres de un menor de 9 años que nació con una sola oreja y con una fisura palatina acusan discriminación educacional, ya que en ningún establecimiento municipal de Puerto Montt han logrado encontrar matrícula para que el niño pueda cursar su Primer Año Básico, pese a que por edad ya debería estar cursando el tercer año.

Daniel Alejandro tiene cerca de un 98% de audición en la única oreja que tiene desarrollada, hecho que, sumado a la fisura palatina que también padece, le ha impedido a la fecha cursar y aprobar como cualquier alumno de su edad el primer año de su enseñanza básica. Sólo tuvo la oportunidad de estudiar dos meses en la Escuela N° 3 Melipulli, pero sus padres optaron por sacarlo del plantel por problemas conductuales.

Su padre, José Norambuena, cuenta que en las escuelas donde han acudido por un cupo les han dicho que se requiere un 95% de audición o más como promedio en ambos oídos para que un menor pueda optar a la enseñanza, algo que le parece una mera excusa, al igual que el argumento de que no hay matrículas disponibles.

Tal como este joven padre lo manifiesta, lo injusto del caso es que en establecimientos educacionales de otras comunas sí les han ofrecido cupos, pero como familia se rehúsan a tener que cambiarse de ciudad para que el menor reciba la enseñanza.

Desde la Dirección de Educación Municipal de Puerto Montt repudiaron el hecho, descartando de plano que a los estudiantes se les exiga un determinado porcentaje de audición, haciendo un llamado a los padres de este menor de 9 años a que se acerquen a la repartición municipal para que, en primero lugar, se evalúe al menor y, luego, se inicie la búsqueda de un cupo en alguna escuela de la comuna.