El influyente semanario inglés, The Economist, no quedó indiferente a lo sucedido este miércoles en el Congreso con la destitución de Harald Beyer. Para el medio europeo lo ocurrido en Chile “tiene un fuerte olor a venganza y a electoralismo”.
Tras los resultados de la acusación constitucional contra Harald Beyer, que determinó su destitución por 20 votos a favor y 18 en contra, el semanario inglés cuestionó que la Concertación y los partidos políticos de izquierda sacaran a un “buen ministro” para ganar puntos políticos en un año electoral.
En su edición de este jueves, The Economist dedicó un artículo al ex ministro de Educación, Harald Beyer, en donde lamentaron lo ocurrido en nuestro país y el accionar de los parlamentarios, señalando que éstos “no son la clase de legisladores que los chilenos se merecen”.
En el escrito, el medio inglés señaló lo realizado por el ex Secretario de Estado durante los últimos años, destacando que “es un tipo de persona sin pretensiones” y que “antes de ser Ministro de Educación, trabajó por más de 20 años en el Centro de Estudios Públicos de Santiago”. Para ellos, es justo describir al ex ministro como un “experto educativo”.
En el artículo también se hace mención a que fue consejero de la ex presidenta socialista Michelle Bachelet en sus políticas de educación en 2006, destacando también los proyectos realizados por Beyer, quien como tercer ministro de Educación en el Gobierno de Sebastián Piñera bajó la tasa de interés que los estudiantes pagan por sus préstamos universitarios del 6% al 2% (CAE) y aumentó el dinero disponible para becas destinada a estudiantes.
Pero al parecer, y según The Economist, lo anterior no pareció importarle al Congreso, al menos a los de oposición de centro izquierda, quienes votaron en conjunto este miércoles para sacar del cargo al ahora ex ministro Beyer.
“Es cierto que el señor Beyer presidió un sistema educativo imperfecto, plagado de irregularidades financieras. Tal vez podría haber hecho más para regularlo. Pero lo mismo se podría haber dicho de sus 2 predecesores durante el Gobierno de Piñera, o de cualquier ministro de Educación de los 20 años anteriores cuando la Concertación estaba al mando”, aseguró el medio inglés.
Por todo lo anterior, The Economist en su análisis concluyó que “el voto huele a venganza”, esto porque hace 5 años atrás, la centro derecha destituyó como ministra de Educación (de la Concertación) a la Yasna Provoste.
“Para muchos de la centro izquierda, esto fue un incidente que no olvidan y no perdonan”, aseguró el medio, quien también declaró que “la acusación además tiene un fuerte olor a electoralismo. Los chilenos elegirán a un nuevo Presidente en noviembre y la campaña ya tiene un olor repugnante”.
Para finalizar, el semanario declaró que “los chilenos se merecen algo mejor por parte de sus legisladores, y lo saben”, agregando que el 5 de abril pasado, la encuesta Adimark-GfK publicó un estudio que muestra que los índices de aprobación de la Cámara de Diputados y el Senado estaban cerca de sus mínimos históricos, al 16% y 20%, respectivamente.
“Cuando congresistas echan a buenos ministros para ganar puntos políticos, la falta de confianza pública en el Congreso no es de extrañar”, finalizó The Economist.