Manifestantes en topless perturbaron este lunes la visita del presidente ruso Vladimir Putin al salón de la Industria de Hanóver, que inauguró junto a la jefa del gobierno alemán Angela Merkel.
Putin y Merkel estaban en el stand de Volkswagen cuando cuatro feministas de la agrupación internacional Femen que lograron eludir a los guardias ingresaron al lugar.
Las mujeres, que tenían los cuerpos pintados con mensajes, increparon al mandatario ruso gritándole “¡Fuck dictator!”, en protesta contra el machismo de la iglesia ortodoxa y las leyes rusas que han condenado casos como los de las ya conocidas Pussy Riot.
Finalmente las manifestantes fueron detenidas y sacadas del lugar, ante la atenta mirada de los mandatarios y políticos que se encontraban en el encuentro.
Una vez restaurada la calma, Merkel y Putin continuaron con sus respectivos discursos y con las actividades en Alemania, entre las cuales realizaron un homenaje a las víctimas del nazismo en un cementerio para trabajadores forzados cerca de Hanóver, donde están enterradas 386 víctimas asesinadas por la Gestapo en 1945, entre ellas 154 rusos.