Giorgos Katidis marcó el gol de la victoria del AEK de Atenas sobre el Veria en el marco de la Liga griega de fútbol.

Un tanto que desató la lógica euforia del centrocampista, quien corrió desaforado a celebrarlo hacia la tribuna. A la cual apunta con un gesto que muchos reconocen, pero al que pocos adhieren: El saludo nazi.

“El gesto del jugador de saludar a los espectadores haciendo el saludo nazi desafía el sentido común, es profundamente irrespetuoso con todas las víctimas del nazismo y no tiene lugar en la naturaleza pacífica y humana del fútbol. La federación griega condena de manera categórica este comportamiento”, señaló la institución en un comunicado después de una asamblea general extraordinaria celebrada este domingo.

Después del encuentro, el centrocampista de 20 años se excusó con un mensaje en su cuenta de la red social Twitter. “No soy un fascista, no lo habría hecho si hubiera sabido lo que significaba. Si hubiera conocido sus consecuencias, nunca lo habría hecho”, escribió.

El entrenador del AEK de Atenas, el alemán Ewald Lienen, defendió a su jugador. “Es un chico que no tiene ni idea de política, habrá visto este saludo en internet o en otro sitio y lo habrá hecho sin saber lo que significa. Estoy seguro al 100%”, dijo el técnico.

“Estaba llorando en el vestuario cuando vio la reacción de los medios de comunicación. Es joven y debe ser protegido”, añadió Lienen.

Katidis, que ya había jugado para la selección de Grecia de menores de 19 años, tenía opciones de acudir al equipo absoluto.