Militantes talibanes mataron a 21 soldados paquistaníes que fueron secuestrados hace tres días en el noroeste de Pakistán.

El jueves, unos 200 militantes fuertemente armados atacaron dos campamentos paramilitares gubernamentales. Dos miembros de la seguridad murieron y al menos 23 fueron secuestrados.

Los atacantes operaron justo antes del alba en estos campamentos situados en las afueras de Peshawar, capital de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, cercana a las regiones tribales de la frontera con Afganistán.

“Encontramos 21 cuerpos de personal de seguridad acribillados a balazos en una zona deshabitada”, indicó este domingo el responsable del gobierno local Naveed Akbar.

“Uno fue hallado vivo pero herido y fue ingresado al hospital, mientras que otro logró escapar a salvo”, añadió.

Gul Shehzad, otro responsable local, dijo que las autoridades recibieron información justo antes de la medianoche sobre unos cuerpos que yacían en una zona deshabitada a unos cuatro kilómetros de los campamentos.

“Las manos de los soldados estaban atadas”, dijo Shehzad a la AFP.