El París Saint-Germain recuperó el liderato en la liga francesa de fútbol con un triunfo por 1-0 ante el equipo que hasta ahora ocupaba esa posición, el Lyon, este domingo en el partido estelar de la 18ª jornada del campeonato.

Los hombres de Carlo Ancelotti, que llegaban a tres puntos de los lioneses, afrontaron el duelo como si fuera una final y salieron victoriosos gracias a un solitario tanto de Blaise Matuidi en el descuento de la primera parte (45+1).

París Saint-Germain y Lyon quedan por lo tanto igualados a 35 puntos en la clasificación, pero la mayor ventaja de goles a favor del club de la capital (+21 contra +13) les permite disfrutar del honor de la primera plaza.

También con 35 puntos está el Marsella (ventaja de goles de +3), que el sábado ganó 1-0 en Toulouse, con lo que el campeonato nacional adquiere todavía más emoción, con tres equipos igualados en cabeza y un pronóstico incierto en la lucha por suceder al Montpellier, actualmente noveno, como rey de Francia.

Las tres principales ciudades del país, París, Marsella y Lyon, cuentan así con sus clubes-emblema en la pelea y todo ello se debió en gran medida al gol de Matuidi para los parisinos, tras un centro medido del sueco Zlatan Ibrahimovic, que esta vez no marcó y tuvo que conformarse con esa asistencia.

El Lyon pierde fuerza en una semana para olvidar, en la que anteriormente había empatado 1-1 con el Nancy, que queda tras la 18ª jornada como colista.

En los otros partidos del domingo destacó la victoria por 2-0 del Lorient en el terreno del Saint-Etienne, entre dos de las revelaciones de la temporada.

Los bretones, con esta victoria, se pusieron cuartos, cinco puntos por detrás del trío de cabeza, mientras su adversario sigue su mala racha y cae a la octava posición.

Por la mañana, el Burdeos, séptimo, sufrió para empatar 1-1 en el campo del Nancy, último.

El sábado, el partido más destacado había sido el triunfo del Marsella en Toulouse, frente a un equipo que jugó la segunda mitad con nueve jugadores, por las expulsiones en la primera parte del defensa senegalés Cheikh Mbengué (28) y del centrocampista Franck Tabanou (45).

El artillero André-Pierre Gignac anotó el único tanto del encuentro en el 68, dando alas a los pupilos de Elie Baup en la carrera por el título.