Se trató de un simulacro organizado por Gendarmería junto a Bomberos, el SAMU, las policías y la Onemi, y que consideraba el desplome de los módulos 21 y 22 de condenados, con posterior fuga de gas e incendio con un interno lesionado.

El ejercicio comenzó con el traslado de 140 internos, de los módulos antes mencionados para luego dar paso al trabajo de voluntarios de diversas compañías del Cuerpo de Bomberos de Valdivia, quienes apoyados por el carro aljibe, desplegaron mangueras por el recinto penitenciario, ubicado en la salida sur de Valdivia.

También se produjo la simulación de un interno herido producto de las consecuencias del derrumbe, según comentó el alcaide de la cárcel, Comandante Ditter Villarroel, mientras se realizaba el ejercicio.

Asimismo, Villarroel hizo un balance positivo del ejercicio, asegurando que con ello se busca mejorar constantemente el tiempo de respuesta de las instituciones de emergencia ante un eventual siniestro.

Finalmente, el comandante precisó que con este tipo de ejercicios también se busca dar tranquilidad a los familiares de los internos ya que dijo que la institución está preparada para enfrentar algún tipo de emergencia real.